
Tras el conflicto que ha suscitado en la comunidad indígena Yoreme Mayo de San Miguel Zapotitlán provocando su división, el Gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, señaló que se está atendiendo la situación.
‘Estamos escuchando, lo que queremos es que no tengan problemas, que no se confronten, y si hay intromisión del gobierno a través de turismo, lo resolvemos», señaló el Gobernador
Dicho conflicto está vigente desde el 2020, durante la administración del ex presidente municipal de Ahome, Manuel Guillermo Chapman Moreno.

Por lo tanto, hoy, después de dos años donde la comunidad se ha visto envuelta en actos de violencia y señalamientos hacia el gobierno por estar supuestamente politizando las tradiciones indígenas con fines turísticos y económicos, un grupo de indígenas le presentaron esta mañana una solicitud de audiencia al Gobernador de Sinaloa, con la intención de ser escuchados por las autoridades estatales.
Conflicto

Después de que en el 2020 el ex presidente municipal Manuel Guillermo Chapman Moreno, se presentara en la comunidad indígena de San Miguel Zapotitlán para pedir que las fiestas tradicionales no se realizaran ante la llegada del Covid-19 al municipio de Ahome, a lo que el consejo de ancianos de San Miguel aceptó, ya que era un tema de seguridad y salud, y sabían cuan delicado podría ser, mencionan.
Poco tiempo después, Billy Chapman mandó un aviso donde señala que las fiestas tradicionales pueden realizarse, pero solamente con un aforo de 15 personas, pero dicho oficio y aviso, no llegó a las manos de quien era el Pilato tradicional, sino que se le fue entregado a otro grupo, el cual con apoyo del Sindico abrió las puertas del Centro Ceremonial San Miguel Arcángel, denuncian Indigenas
Con este nuevo grupo, nació un segundo pilatos.
El Consejo de Ancianos señala que esta persona a quien nombran El Pilato aún no era su tiempo para serlo, por lo cual, se saltó el proceso que indica la tradición con la supuesta intención de salvar las fiestas tradicionales, de ahí es donde se llevan los contis en el 2020 y después de estos, como no se respetaron las medidas, el resultado fue que se intensificaron los contagios del COVID-19.
Después de esto, las fiestas del 2021 se celebraron con 2 pilatos (El tradicional y el nuevo pilatos).
Cabe destacar que gran parte de los fiesteros apoyan al nuevo pilatos ya que lo ven como el salvador, señalan los denunciantes.

Como el consejo de ancianos no estaban a favor de que el tratado se rompiera, ya que era muy riesgoso, el grupo inconforme tomó el mando, y hoy, han llegado a posicionarse como los lideres tradicionales con las autoridades municipales. Dejando de lado a quienes han llevado la tradición por generaciones, indígenas que lo unico que piden es que su tradición no sea politizada, profanada y mal enseñada, y solo usada con fines turísticos.